Mi celular recibió un mensaje de texto a las 7:32 am, la noticia no era agradable: "Murió José Saramago".Desde ese instante mi día giró alrededor de recordar todas aquellas tardes que he pasado leyéndolo y analizándole. Ahora solo quedan sus letras, su riqueza.
Ochenta y siete años, una persona acabada en lo físico, pero muy lúcida; escribió en sus últimos días... Creo que lo he comentado, pero poco a poco veo llegar a su fin muchos ciclos y personas importantes de mi vida (la coincidencia no existe, solo la ilusión de...), José fue un escritor de quien aprendí mucho y con el que me he identificado.
"Luto de la literatura"... sin duda lo más brillante y trillado que podría decir hoy.
Tengo sensaciones muy raras, muy complejas, aun no lo digiero, he pasado de la euforia que deja el futbol a la crudeza del diaro vivir.
Saramago no fue el mejor narrador que la humanidad haya leído, pero si ha sido el más valiente, y esto, la crítica que algún día le otorgó el Premio Nobel de Literatura lo sabe y le reconoce hasta el día de hoy.
"La derrota tiene algo positivo, nunca es definitiva. En cambio la victoria tiene algo negativo, jamás es definitiva." (Saramago)
Siempre le agradeceré a una maestra de la Universidad el invitarme a conocer la obra de este escritor portugués, ya que fue así como dí con "Ensayo sobre la ceguera"(novela que fue llevada al cine), e iniciada la primera página no pude dejar de leerlo, se convirtió en mi novela favorita (y gracias a Dios he tenido la oportunidad de leer otras opciones literarias y ninguna tan osada como esa magistral obra de José); después vino "Ensayo sobre la lucidez" y me sucedió algo similar, pero quedó pendiente "Ensayo sobre la democracia" (que sería la tercera parte), obra que hace unos años Saramago prometió que sería su último libro; no fue así, nunca llegó, es más... publicó otras obras antes de su muerte; quedó sin concluir una gran historia.
"Los únicos interesados en cambiar el mundo son los pesimistas, porque los optimistas están encantados con lo que hay." (Saramago)
Directo, valiente e irónico, a José siempre se le pudo leer entre líneas, porque sus metáforas y analogías siempre fueron transparentes. Se ha ido una de esas personas que generan opinión y conciencia en la sociedad, de aquellas que estorban a muchos gobiernos. Opiniones y acciones humanistas como las de él pesan bastante. Es muy difícil que exista otro lector social tan brillante como Saramago.
"Como escritor y como persona, mi empeño es no separar al escritor de la persona que soy. Me esfuerzo, en la medida de mis posibilidades, en tratar de entender y explicar el mundo." (Saramago)
Este breve escrito no es digno de quien he admirado tanto, pero estoy ofuscado, y no quería dejar pasar la oportunidad de agradecerle una y más cosas al que en este blog ha sido más de una vez mencionado y citado. Especialmente le agradezco esto:
"Yo no decido sobre lo que voy a escribir. No, yo espero a que algo ocurra." (José Saramago)
Gracias por dejarme esa escuela, mi ensayo es Saramago, la gran influencia de mis letras.
Adiós José Saramago. El maestro que jamás pude ver y del cual aprendí tanto.
Buen día.
2 comentarios:
A mi no me ha caído el veinte.
Imaginame...
:(
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