No sé si llamar a ésto que les narraré: una analogía muy mía... pero ahí les va:
Tuve la oportunidad de jugar futbol (soccer) desde muy joven y también lo abandoné joven... Nunca tuve el objetivo de vivir del futbol, o de convertirme en profesional, aun así... Siempre amaré este deporte.
Jamás fui un jugador brillante, aunque siempre aposté a ello, a lo fuera de serie, a jugar de una manera osada, distinta.
Entrenaba muy fuerte, siempre hice todo lo que se me pidió, y en muchas ocasiones los días de partido no era requerido, o si lo lograba, era solo por breves minutos, en los que yo tenía que hacer algo sobresaliente para quedarme en el cuadro titular o simplemente ganarme mis próximos minutos.
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Peter Schmeichel, un portero de época, leyenda de
Dinamarca y del Manchester United. |
Recuerdo muy bien mis inicios, lo hacía como "Portero", admiraba en sobremanera a guardametas de mi época como lo fueron: Campos, Navarro, Ríos, Zubizarreta, Goycochea, Schmeichel .... en fin, un sin número de arqueros superdotados.
Tenía alrededor de 13 años, cuando un día se acercó mi entrenador a decirme algo, y eso que se me dijo ha sido un patrón que se viene repitiendo en muchos de los aspectos de mi vida, tanto en lo laboral, sentimental, académico, entre otros (ya en estos casi 31 años de trayecto), y fue lo siguiente:
"
Mira Jorge, tu eres el mejor portero que tengo en el equipo (éramos tres)
, eres el más seguro, y el que tiene las mejores condiciones de todos, no tengo duda, el equipo tampoco, ... pero en el cuadro titular va a estar: "fulano de tal".... (razones muchas, no puedo contárselas yo), jajajaja en verdad así fue, textualmente esas fueron sus palabras, que ojalá las hubiera escuchado y puesto en práctica solo en aquel momento.
Doy gracias a mi Dios por haberme enseñado a respetar siempre las decisiones de mis superiores (aunque no las comparta). Al tiempo tuve la oportunidad de jugar y demostrar que podía con el trabajo, gaD pude usar los guantes y mi traje fluorescente con el número 25 por un tiempo considerable, hasta que un día (en un partido oficial de futbol rápido) por necesidad técnica me movieron de la portería a la defensa y como jugador de campo probé las mieles de ganar un juego pateando la pelota y no atajándola, desde ahí lo supe: "adiós portería"...
Posterior a ello (mi corta trayectoria de portero), vino la de jugador de campo, nada como tener la oportunidad de poder anotar goles o estar cerca de la adrenalina de quienes los construyen.... jajajaja, esa era mi ilusa idea, hasta que me ¡tocó de nuevo comer banca!, jajaja, y no fueron partidos, sino temporadas casi completas... torneos en los que tuve que ser el mejor compañero y apoyar a mi equipo en todo.
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Antonio "el Turco" Mohamed.
Brillante jugador argentino que derrochó calidad en
nuestra Liga. Probablemente al Turco se le recuerda
más por sus problemas con la báscula que por los
grandes números que alcanzó como jugador.
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En todo ese tiempo creo que ni contando los minutos de todas las temporadas completaba dos partidos completos, aun así yo entrenaba más duro, veía mas futbol, aprendía más... minuto que jugaba lo hacía con excelencia, nunca hubo un juego donde no convirtiera una jugada en cereza, si había que dar un pase mínimo tendría que ser de tres dedos, de tacón o primera intención, de eso si me podré jactar.
Aun así viví lo mismo, vi pasar cada petardo por refuerzo en el equipo en donde jugué 5 años, y créanme, era injusto e inadmisible... quien estuvo trabajando la oportunidad "era yo", quien mejoraba "era yo", quien fue fiel siempre al grupo "era yo", pero quienes jugaban y muchas ocasiones sin compromiso alguno, fueron los petardos... jejejeje.
Pero nunca renuncié al juego, ni al grupo, al menos eso no fue lo que me dejó fuera de las canchas.
Posterior a ello tuve mi año de gloria en lo amateur, y siempre recordaré de mayor forma aquellos juegos en que no anoté ni de broma, pero en los que me atreví a realizar jugadas inadmisibles en una persona de mi físico y estatura (bueno, aclaro que eso también fue hace 13 años con 25 kilos menos), hice movimientos que de haberlos planificado antes de un partido en mi vida los podría volver a realizar; modestia aparte, pero si tuve algo a aparte de garra (porque de eso me valía: de mi entrega, o mi pundonor) fue un poco de magia, al menos pensaba rápido en el campo, en algunas ocasiones llegué a pensar fantástico.
Pero un día, en un juego de rápido, fui por un pase filtrado que me mandaron para que anotara, vi que el portero rival salió barriéndose fuera de su área, y no me percaté cuando éste ya me había tocado la parte baja de mis piernas, entonces di un semi giro en el aire y caí sobre el cemento de la cancha, sentí el costalazo en mi espalda y luego un golpe doble, en la cabeza, después vi a mis amigos echándome aire con rostros de preocupación... había quedado inconsciente por segundos; yo me paré y seguí jugando en estado automático... al día siguiente mi cuello no respondía mucho... y si no me equivoco, fue mi último partido, a los veinte años de edad.
Y todos aquellos con los que compartí por años el entrenar dos o tres días a la semana, para jugar en los fines, y vernos casi a diario... nos fuimos separando por deberes de vida, solo uno o dos siguen practicando el futbol hasta el día de hoy.
En momentos que son meramente ilusos, donde te dan ganas de regresar el tiempo hacía atrás, yo me podría preguntar si cambiaría algo, y definitivamente lo afirmo: "NO"... inclusive en este experiencia viva que podría tener algún significado para mi.
Nunca renuncié al reto, mi amor por el futbol siguió intacto, es más..
sigue intacto.
Muchas veces tuve que
salir del partido, en muchas más
ni siquiera inicié o
jugué.
Si el entrenador o compañero a cargo no se percató de que
yo le servía para sacar el resultado,
ya no importa.
Yo siempre
estaría de nuevo para esos equipos que me dieron
la oportunidad de jugar y mostrar mi amor por el futbol.
Si el tiempo regresara, y de nuevo se tuvieran que repetir todos esos momentos en los que
me vuelven a sentar en la banca... será motivo una vez más, en los que tendré que
respetar el diseño de partido del entrenador, si con ese cuadro él considera sacar un resultado favorable... todo sea por el equipo (siempre).
Si sucediera, yo estaría de igual y mejor actitud para aportar, entrando en el momento indicado, hacerme de el, e intentar por cada minuto jugado quedarme en el campo, porque esa seguiría siendo mi ambición, y porque nadie está por
encima del equipo, así como nadie podrá estar nunca por encima del juego.
No siempre se debe tratar de entenderlo todo, a veces no solo se trata de entender, sino de aceptar.
Qué recuerdos los míos. Me sacaron una sonrisa el día de hoy =)
Imágenes:
(1) http://www.google.com.mx/imgres?um=1&hl=es&sa=N&biw=1280&bih=677&tbm=isch&tbnid=XkCkc9a354vKDM:&imgrefurl=http://www.telediario.mx/jugador-del-dia/peter-schmeichel-gran-danes&docid=X_0WdMmmVRnUNM&imgurl=http://www.telediario.mx/images/galerias/807_0_2049227404.jpg&w=600&h=399&ei=VpsbUIfEB8aGjAKom4HIDQ&zoom=1&iact=hc&vpx=716&vpy=193&dur=77&hovh=183&hovw=275&tx=116&ty=106&sig=113459660230844114058&page=1&tbnh=138&tbnw=184&start=0&ndsp=17&ved=1t:429,r:3,s:0,i:93
(2) http://www.google.com.mx/imgres?um=1&hl=es&sa=N&biw=1280&bih=634&tbm=isch&tbnid=rx77OMpsV2bILM:&imgrefurl=http://mx.deportes.yahoo.com/fotos/antonio-mohamed-un-turco-inolvidable-1316579911-slideshow/&docid=KfCtTeoV9G2bxM&imgurl=http://l3.yimg.com/bt/api/res/1.2/maqEHKKbLp7LuS70qE6tKQ--/YXBwaWQ9eW5ld3M7Zmk9aW5zZXQ7aD02MDA7cT04NTt3PTQwMA--/http://l.yimg.com/os/275/2011/09/21/MOHAMED-JUGADOR-TOROS-NEZA_043112.jpg&w=400&h=600&ei=-JsbUN_xDIqciQLD1YCIBw&zoom=1&iact=rc&dur=488&sig=113459660230844114058&page=1&tbnh=141&tbnw=106&start=0&ndsp=21&ved=1t:429,r:6,s:0,i:88&tx=59&ty=60
Pareciera ser que nuestro futbol y ciertos sectores sociales de Mexico han despertado, no tienen complejos, buscan los cambios necesarios, se cree que se puede triunfar; se ha cambiado la entereza ante la adversidad por la gloria de saberse vencedor. Se dio el tan esperado salto de calidad, aquel que dice que si un sujeto va a emprender una lucha, es porque piensa únicamente en obtener la victoria.
El Oro conquistado y el sitio permanente en la historia del Olimpo que los jugadores han escrito magistralmente el día de hoy, sustentan cada una de éstas palabras. Buenos y mejores días para todos.
