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Por: Jorge Castro.
Cómo empezar estas extensas líneas?, la verdad es que desearía terminarlas y no volver a escribir o recordar más sobre esto; pero la nostalgia me invade, así como los recuerdos... quisiera evadir lo primero y mitificar lo segundo.
El pasado jueves 22 de febrero finalicé oficialmente lo que hace cuatro años y medio apenas comenzaba, todo fue en un abrir y cerrar de ojos; ahora no me la creo, aun no me cae el veinte del todo, pero en mí persona se han descargado nuevas responsabilidades, tanto espirituales, como humanas, profesionales y sociales.
¿Porque escribir sobre esto y darle tantas vueltas al asunto?.... Bueno, ¿Por qué no? No estoy desperdiciando papel, ni estoy usurpando un espacio sagrado en un periódico como lo es el de la sección “Sociales”. No, yo solo busco externar así como intentar resumir, casi 5 años de mi vida ... en unas cuantas líneas.
Nuestro momento de gloria fue el pasado el jueves 22 de febrero, el viernes 23 fue para relajarnos con nuestras familias y amigos, el sábado para descansarlo, y el domingo para agradecer así como asimilarse.... pero el lunes... el lunes ya fue otro cantar. Hace ya un semestre exactamente mi carrera dio fin, osea, ya había finalizado mis materias, sólo adeudaba mi servicio social profesional el cual finalizo el próximo martes.... pero ese es otro tema.
Volviendo a la tierra --- comentaba que el lunes fue otro cantar y vaya que si, a pesar de asistir a mi Facultad durante seis meses y fracción, nunca me había sentido tan ridículo y tan observado por los demás, se que es un sentimiento tonto, pero lo describo “como la semana más larga de mi vida, hasta el momento”; desde hace 19 años o más, yo he utilizado a diario una mochila, pero nunca me he sentido tan indigno o ridículo de entrar a un lugar con ella como en estos días, sí, en estos en los que deseo que ya sea martes para ir tramitando mi salida oficial de un lugar al que ame demasiado.
Caminando por los pasillos de ese “recinto del saber” y en muchas ocasiones de la conformidad, así como algunos otros grandes defectos más que tiene la Facultad de Ciencias Humanas; mi mente se comporta como una película, donde se proyectan rostros conocidos para mí, y se reviven situaciones vividas en el mismo... no sólo se vienen a mi subconsciente recuerdos de situaciones positivas, de hecho las negativas son las que tienen más impacto en mi cerebro, ya que ellas me han transformado a mi estado actual.
El pasado jueves 22 de febrero finalicé oficialmente lo que hace cuatro años y medio apenas comenzaba, todo fue en un abrir y cerrar de ojos; ahora no me la creo, aun no me cae el veinte del todo, pero en mí persona se han descargado nuevas responsabilidades, tanto espirituales, como humanas, profesionales y sociales.
¿Porque escribir sobre esto y darle tantas vueltas al asunto?.... Bueno, ¿Por qué no? No estoy desperdiciando papel, ni estoy usurpando un espacio sagrado en un periódico como lo es el de la sección “Sociales”. No, yo solo busco externar así como intentar resumir, casi 5 años de mi vida ... en unas cuantas líneas.
Nuestro momento de gloria fue el pasado el jueves 22 de febrero, el viernes 23 fue para relajarnos con nuestras familias y amigos, el sábado para descansarlo, y el domingo para agradecer así como asimilarse.... pero el lunes... el lunes ya fue otro cantar. Hace ya un semestre exactamente mi carrera dio fin, osea, ya había finalizado mis materias, sólo adeudaba mi servicio social profesional el cual finalizo el próximo martes.... pero ese es otro tema.
Volviendo a la tierra --- comentaba que el lunes fue otro cantar y vaya que si, a pesar de asistir a mi Facultad durante seis meses y fracción, nunca me había sentido tan ridículo y tan observado por los demás, se que es un sentimiento tonto, pero lo describo “como la semana más larga de mi vida, hasta el momento”; desde hace 19 años o más, yo he utilizado a diario una mochila, pero nunca me he sentido tan indigno o ridículo de entrar a un lugar con ella como en estos días, sí, en estos en los que deseo que ya sea martes para ir tramitando mi salida oficial de un lugar al que ame demasiado.
Caminando por los pasillos de ese “recinto del saber” y en muchas ocasiones de la conformidad, así como algunos otros grandes defectos más que tiene la Facultad de Ciencias Humanas; mi mente se comporta como una película, donde se proyectan rostros conocidos para mí, y se reviven situaciones vividas en el mismo... no sólo se vienen a mi subconsciente recuerdos de situaciones positivas, de hecho las negativas son las que tienen más impacto en mi cerebro, ya que ellas me han transformado a mi estado actual.
Nunca seré de las personas que podrán alardearse de haber conocido al “amor de su vida” en la Universidad, de hecho, en mi caso--- fue ahí donde conocí y experimenté la peor desilusión en lo que hasta ahora llevo de vida (sentimentalmente hablando), alguien que ahora es detestable y a su vez indiferente para mí. También padecí rumores, me traicionaron algunas personas, entre estas, uno se autonombro “Mi mejor amigo” .... uyyy, de este personaje podría escribir un libro, créanme es un sujeto... más bien un ¡sujetote grande además de fascinante!, tanto que las personas se duermen cuando el abre su boca como el salivero que es ... uno que escupe y jamás dice algo coherente.
Doy gracias a Dios por todo lo anterior, porque como lo he mencionado, gracias a ÉL, ésto me forjo, me reformo, Jorge a tiempo se pudo reinventar; así que como padecí todo aquello, disfrute también de muchas personas, y conocí a fondo sus personalidades, muchas de ellas son grandes en verdad, amigos pocos, pero a ellos--- las gracias. Y a mis Maestros --- les estaré en deuda.
Se que después de terminar este texto no me volverá a dar pena ponerme una mochila el próximo Martes 6 de marzo, y culminar mi última misión en ese lugar. En realidad no creo abarcar cuatro años y medio en estas extensas líneas, pero intentaré resumir algo significativo para mí.
Doy gracias a Dios por todo lo anterior, porque como lo he mencionado, gracias a ÉL, ésto me forjo, me reformo, Jorge a tiempo se pudo reinventar; así que como padecí todo aquello, disfrute también de muchas personas, y conocí a fondo sus personalidades, muchas de ellas son grandes en verdad, amigos pocos, pero a ellos--- las gracias. Y a mis Maestros --- les estaré en deuda.
Se que después de terminar este texto no me volverá a dar pena ponerme una mochila el próximo Martes 6 de marzo, y culminar mi última misión en ese lugar. En realidad no creo abarcar cuatro años y medio en estas extensas líneas, pero intentaré resumir algo significativo para mí.
Febrero del 2002....el inicio
Después de haber pasado un año en la inactividad académica, debido a una desición desafortunada en mi vida, como estudiar algo que no me correspondía (L.A.E.), Dios me puso en el lugar correcto, sin batallar, sin la interferencia de nadie, solo de Él, y de mis condiciones naturales que me dio... es así como un lunes 4 de febrero inició todo.
Eran las 4:10 pm, iba ya muy tarde y no encontraba mi salón de clase aun, recuerdo que empecé a abrir puertas en cada salón de la Facultad, hasta que dí con uno donde había alrededor de 8 personas, y dije: “nnaaaa, aquí han de estar impartiendo una clase de Maestría,(esto por el grupo tan reducido)”, y preferí no interrumpir. Pasados unos minutos verifiqué en la administración cual era mi grupo, y en efecto, era el del grupo de ocho personas.
Al abrir la puerta, vi a uno de los docentes más mediocres que tuve (académicamente hablando) en toda mi carrera, pero en ese momento lo único que hice fue pedir disculpas por mi retraso. Así que en ese momento, las ocho miradas se centraban en mi, nada parecido a las 1, 500 personas que me han observado durante esta semana.
Primer semestre transcurrió sin pena ni gloria, así como todo el periodo del tronco común o etapa básica; que fueron tres largos semestres, donde tuve compañeros para el recuerdo, pero muchos más ... para el olvido. Pero las bases estaban más que sentadas, yo estaba listo y probado para las humanidades. Así que a Santiago Casares, y a los docentes que hicieron un esfuerzo pedagógico similar en esa etapa inicial, que es sumamente importante para cualquier estudiante y ser humano ... gracias.
Y todo se encamina también a Febrero ... pero del 2007
Después de haber pasado un año en la inactividad académica, debido a una desición desafortunada en mi vida, como estudiar algo que no me correspondía (L.A.E.), Dios me puso en el lugar correcto, sin batallar, sin la interferencia de nadie, solo de Él, y de mis condiciones naturales que me dio... es así como un lunes 4 de febrero inició todo.
Eran las 4:10 pm, iba ya muy tarde y no encontraba mi salón de clase aun, recuerdo que empecé a abrir puertas en cada salón de la Facultad, hasta que dí con uno donde había alrededor de 8 personas, y dije: “nnaaaa, aquí han de estar impartiendo una clase de Maestría,(esto por el grupo tan reducido)”, y preferí no interrumpir. Pasados unos minutos verifiqué en la administración cual era mi grupo, y en efecto, era el del grupo de ocho personas.
Al abrir la puerta, vi a uno de los docentes más mediocres que tuve (académicamente hablando) en toda mi carrera, pero en ese momento lo único que hice fue pedir disculpas por mi retraso. Así que en ese momento, las ocho miradas se centraban en mi, nada parecido a las 1, 500 personas que me han observado durante esta semana.
Primer semestre transcurrió sin pena ni gloria, así como todo el periodo del tronco común o etapa básica; que fueron tres largos semestres, donde tuve compañeros para el recuerdo, pero muchos más ... para el olvido. Pero las bases estaban más que sentadas, yo estaba listo y probado para las humanidades. Así que a Santiago Casares, y a los docentes que hicieron un esfuerzo pedagógico similar en esa etapa inicial, que es sumamente importante para cualquier estudiante y ser humano ... gracias.
Y todo se encamina también a Febrero ... pero del 2007
De la nada transcurrieron nueve semestres y uno extra de servicio social, hablar de que sucedió en los seis semestres restantes, sería hablar de tres de los mejores años de aprovechamiento espiritual, académico y humano que he tenido en mi vida. Y para esto, he decidido elaborar un pequeño homenaje a todos aquellas personas que son trascendentes durante y en la culminación de mi carrera, aquellos con los que compartí la misma (Maestros y Amigos de profesión), ya que en ese lugar compartimos un tiempo considerable de vida.
Así que preferí rendirle a ellos este pequeño espacio como un tributo; en vez de seguir narrando una crónica de mi estancia en la Facultad, que posiblemente jamás terminaría de redactarla, ya que mis vivencias no son lo suficientemente interesantes para ti como lector. Pero además de ello, es porque la vida es como la disciplina que que tuve la oportunidad de estudiar, es difícil contarla o enseñarla, se tiene que vivir como dice el Nobel Gabriel, se tiene que sentir....
Los Maestros:
Santiago Casares .... 1er semestre: Aunque comúnmente se te dificulta acordarte de mí, tu siempre estarás como aquella persona que puso una loza sobre mi mundo y me hizo entender de una manera clara, pragmática, así como realista el discurso de las humanidades. Pero por sobre ello, admiraré tu sarcasmo así como la forma en que encaras la vida.
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Me demostraste que la dignidad es algo elemental en un ser humano, sobre todo si este es un profesional, también me enseñaste a no guardar silencio aunque el contexto fuera severamente crítico.... y vaya que experimentamos eso... (muchos saben a que situación me refiero); me invitaste a que aprovecharara esos pocos canales u oídos que escuchan para emitir nuestra voz. Definitivamente eres una leyenda en esta Institución, a la cual espero por el bien de ella, nunca te dejen jubilar, si es que no queremos perder una gran parte de nuestra Facultad y todo lo que ahí se enseña; ya que eres una de las maestras que han llevado a sus espaldas el discurso “Crítico” y “Culturalista” en esta escuela, la cual es meramente “Positivista” en sus planes de estudio así como en sus procesos.
Eres una idealista, y me encantaría llegar a tu edad teniendo ese espíritu de lucha tan vivo, como el que nos demostraste a todos nosotros durante estos años en los que tuve la fortuna de conocerte, y más lo que delata tu historial por si solo.... humanamente nada te tumba .... eres única.
Jorge Ortega... 4to y 5to semestre: Poeta y escritor, genio y figura, tu dinámica en clase no parecía del todo efectiva, sin embargo si daba resultados, contigo leí muchos libros en un periodo de tiempo muy corto, y te agradezco el haber trabajado más en mi el gusto por la lectura, así como impulsarme a seguir escribiendo... te eche de menos cuando partiste a España.
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Francisco Chang... 6to y 9no semestre: Con el seré breve, porque además de que jamás leerá esto, es un hombre de pocas palabras y sin pelos en la lengua.... Chino: Sin ti la escuela se caería, porque la conoces tanto a ella y sus procesos ya que la fundaste. Gracias por recibir golpes (en el sentido estricto de la palabra) durante la lucha por los espacios, y sobre todo gracias por tu practicidad como docente, así como la eterna lucha por el bienestar de los alumnos, ya que siempre le has dado el valor necesario que merecen los estudiantes como “la materia más importante que posee una institución educativa”.... Definitivamente tú eres un peligro para la Universidad.
Los Amigos...
Conocí muchos rostros, me case con pocas personas, como todo en la vida, te gustan muchas cosas, pero tu poder adquisitivo te da solo para comprar un tanto; en este caso mi afinidad solo da para algunos, y espero no ofender a nadie.
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No quiero dejar fuera a nadie, la memoria me falla, y más a la hora de redactar esto, pero por ahí se encuentran...
Arianna Varela, con la que compartí la carrera desde primer semestre, quién es periodista y gracias a ella tuve mi primera oportunidad en un Diario. La estimo mucho y le deseo estabilidad primeramente así como lo mejor para ella.
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Yaritza López, alguien con quien siempre me es agradable conversar, una de esas personas de las que me ve y se ríe como si yo tuviera la cara pintada....nunca sabré el porque de su risa.
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Yaritza López, alguien con quien siempre me es agradable conversar, una de esas personas de las que me ve y se ríe como si yo tuviera la cara pintada....nunca sabré el porque de su risa.
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Erika Rodriguez, Princesa de la oscuridad. La verdad es que nunca pense en conocer a nadie más a mi noveno semestre, pero así fue, llegaste para quedarte, eres alguien a quien le he aprendido muchas cosas, entre ellas otra forma de ver el mundo ... pero por el momento me quedo sin palabras, solo te quiero y te estimo ....
Así pues, lo que inició en febrero para mí, años despues terminaría en ese mismo mes. El aula con ocho alumnos, terminó con cuarenta y siete egresados. Las ocho miradas clavadas sobre el tipo grandote que llegó tarde aquel día, se mantendrán de igual forma, pero multiplicadas por miles que desde ahora supervisaran mi trabajo. Una responsabilidad muy grande se avecina, así que espero en Dios cumplirla cabalmente.
Por el momento sólo me queda mantener lo que sembré, en cuatro años y medio fui como una especie de esponja, la cual absorbió lo mejor de todas estas maravillosas personas, a las que en realidad no tuve la oportunidad de agradecerles personalmente todo lo que aquí he redactado, en los dos días tan cortos que tuvimos para festejarnos.
Por el momento sólo me queda mantener lo que sembré, en cuatro años y medio fui como una especie de esponja, la cual absorbió lo mejor de todas estas maravillosas personas, a las que en realidad no tuve la oportunidad de agradecerles personalmente todo lo que aquí he redactado, en los dos días tan cortos que tuvimos para festejarnos.
Con modestía aparte les afirmo que esta es “una Generación distinta” e incluso histórica (casí nombre por nombre), "compacta", no lo digo yo, sino lo docentes y administrativos de esta institución. De lo más sobresaliente que ha tenido esta Facultad en muchos años .... Otra 33 no existirá jamás, DAMAS Y CABALLEROS .... fue "el debút y despedida", .... a ustedes les deseo lo mejor, Dios les bendiga .... ¡Buen día!
5 comentarios:
creo que me veo un poco ridicula aplaudiendo...
tengo ganas de llorar.
:)
Heyy yo no habia leido esto!...
la nostalgia esta aqui....
Gracias Jorge,
se te estima tambien!!
:)
QUIEN QUIERA QUE SEAS (DE HECHO SE MUY BIEN QUIEN CUERNOS ERES...),SOLO QUIERO RENDIRTE MI ADMIRACIÓN, PORQUE NO SE COMO TE ALCANZA EL TIEMPO COMO PARA PERDERLO DE ESTA MANERA... ¿¿QUIEN CUERNOS PIENSAS QUE TE VA A CREER QUE TU ERES JORGE ORTEGA...?? POR FAVOR!!! CON EL RESPETO QUE ME MERECES TU BLOG (ESE DONDE TE HACES PASAR POR ESA PERSONA) ES UN ASCO...
HASTA PARA PARODIAR A ALGUIEN CREEME QUE SE NECESITA ALGO MÁS.... Y TE FALTA UN BUEN MI ESTIMADO.
Y vaya que fueron las decisiones correctas amigo! La primera porque fue asi como tuve la oportunidad de convivir y compartir con una de las pocas personas de las que en verdad valio la pena conocer y conservar estos cinco años de carrera. Y la segunda porque agradezco haber podido festejar junto a mi mas entrañable amigo de universidad el fin de esta importante etapa.
Gracias por todo, en serio por todo. Te quiero y aprecio muchisimo!
Arianna Varela
Hola Jorge, se que esto lo escribiste hace más de un año, pero apenas me encontré con ello. Y de verdad, estuvo lindísimo. Gracias por lo vivido, y créeme me sorprende saber que te agrada platicar conmigo. Oye siempre que te veía sonreía porque eres tú, único y especial, eso da felicidad por estar con alguien auténtico, además eres muy gracioso, jajaja. Cuídate, no te pierdas y mucho éxito te lo mereces...
Yaritza López Segoviano
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