jueves, 11 de octubre de 2007

Guía


Del hombre son las dispocisiones del corazón; mas de Jehová es la respuesta de la lengua. "Proverbios 16:1"

Llegué aborrecer las noches, porque son en ellas cuando fluyen mejor mis ideas.

Entre tantas cosas que he descubierto en mí (en los últimos meses), está la de que no tengo madera para escritor, ya que no tengo el cuidado de levantarme en pleno sueño, a redactar las lúcidas palabras con las que mi persona se desenvuelve durante esa realidad pasajera que desarrrolla mi mente, por las noches y madrugadas.

Pero en cuanto abro los ojos, todo se vuelve a nublar. Sigo siendo el mismo; se volvió a escapar el valor, la seguridad, y muchas otras cosas mas (que también no recuerdo como las logré). TU no te comunicas en sueños, lo sé bien; pero me gustaría ser aquella persona que olvido como es, todos los días al despertarme.

Mi hermetismo fue el primer paso para llevarme a un estado al que jamás deseo volver, todo por un futuro que busqué por mis fueros... y dolió. Y gracias a TI hoy escucho alegría en mi cuerpo abatido.

Ahora has entrado hasta mi recamara (siempre la conociste), solo que hoy sí he compartido contigo donde oculto las cosas que mas aprecio, y afirmarte que posees un lugar dentro de mí, muy por encima de Superman. También conoces el orden de acomodo de mis Superheroes, luchadores y hobbies. Sabes que leo mucho, y que son pocos los libros que compro realmente, también que me has bendecido con grandes amigos, y que muchos de ellos son a distancia. (He aquí, tu amas la verdad en lo íntimo, y en lo secreto me has hecho comprender sabiduría. "Salmos 51:6").

Tu mano fue poderosa para sacar el lado oscuro de mi vida, hoy no me molesta tratar ese punto, porque ya lo superé. Serían tantas y tantas cosas por agradecerte, que mi mente daría demasiado, al grado que un solo blog no fuera suficiente. En terminos generales, me siento bien, me has jalado las orejas cada vez que me he querido pasar de la raya (lo reconozco), además ese fue nuestro pacto y quiero que siga así.

TU mas que ningún otro ser bajo el cielo, conoce mi condición. Ayudame a no adelantarme a tu tiempo, trae certeza a mis acciones que ejecute (si no arriesgo, no maduro, lo sé bien), guíame por lo que tu tienes dispuesto para mi vivir, y sobre todo, mantenme felíz con ello.

Trae claridad a mi mente, bien sabes como disfruto mis ratos de silencio interno, e incluso que me agrada compartirlos solo con muy pocas personas en el mundo. Pero también sé que estos pueden ir de lo mas placentero a lo mas peligroso.

Mi mente no es nada comparada contigo, anteriormente tuve un gran amor por mi cerebro (sin ser alguién brillante...aclaro), y tu te encargaste de tratar conmigo, como lo hiciste con Nabucodonosor (solo por ejemplificar, tal vez solo me falto su aspecto), y no me cansaré de agradecertelo (Abominación a Jehová es todo altivo de corazón; ciertamente no quedará impune "Proverbios 16:5").

He admitido mi temor por jugar beisbol, TU y casi nadie sabe bien que le tengo miedo a la pelota de hueso desde pequeño (y que por ello siempre deteste jugar ese deporte). Pero el uso popular que se aplica a la acción que ejerce el "bate" (humanamente hablando), se usa comunmente para el tema de las relaciones de pareja. En mi caso ya no descarto ese asunto (aprendí también a que no debo de intentar limitarte con ese aspecto de mi vida, porque sería dudar y querer escapar de manera tonta, de lo que Tú deseas para mí "Y SOBRE TODO DE TUS TIEMPOS").
Pero mis "temores" por llamarlos de esa manera, no solo van relacionados con ese punto, la caja de bateo esta esperandome para toda mi vida, incluso; algunos de estos aspectos deben ir por encima de eso, y que también son prioridades como: vida espiritual (incluye todo), familia, trabajo, provisión, desarrollo profesional. No desgloso cada punto en este momento, porque TU conoces mejor que yo la situación.

En pocas palabras me veo reflejado, como un pitcher que quiere lograr que sus oponentes no le vean el polvo a la pelota durante las nueve entradas. "Una especie de juego casi perfecto", donde este intenta apoyar a sus compañeros. Pero en sobremayor medida, agradecer y darle un lugar de trascendencia a su entrenador; al cual ese jugador le debe todo, y que por sobre eso, le brindó algo tan importante como lo es: "la confianza y el libre albedrío".

No me quiero encariñar ni obsesionar con nada (sobre todo con lo que esta en la tierra), ese sería el principio de otro adebacle. Solo te pido (aparte de toooodddoo lo demás) que me ayudes a externar, guíame a interpretar, sé que no me diste espíritu de cobardía, pero sé también que me comprendes y sabes bien que de tiempo para acá... me siento colapsado.

Quiero decirlo todo, y a su vez nada. Se que yo solo no podré con tanto, administra mis emociones y no permitas que sean estas las que me hagan dar pasos y luego lamentarlos. Tal como dijo alguién que admiro en el mundo: "nadie me recordará por mis pensamientos secretos". Ayudame a esperar, así como expresarme y decidir con sabiduria.

Desde hoy ocupo ir más allá de todo lo que leo y observo. Llevame a emprender.
Ayudame a perder mi temor por jugar beisbol.
Salmo 56:3
"En el día que temo, yo en ti confío".
Me has mostrado que en silencio no comunico mejor.

1 comentario:

Unknown dijo...

Que claridad puede producir Dios cuando nos vemos como El nos ve y reconocemos su autoridad para darle el lugar que merece GaD que te la dado a ti :)